Como dice María Gómez del Pozuelo, CEO de Womenalia, «El mix de la oficina y el trabajo en remoto ha venido para quedarse. Aquí el modelo de despaching peloting o el silloning ya no van a tener valor».
Me vienen a la mente algunos jefes que he tenido y me imagino lo mal que lo deben estar llevando. Y algunos compañeros también, porque si el «silloning» desaparece, ¿cómo van a «venderse» a partir de ahora?.
Cuando el presentismo era una práctica aún bien asumida y habitual, ya me revelaba yo contra ella. Hace 20 años, ya predicaba, para dolor de cabeza de alguno que no lo entendía, que la valoración de un trabajador ha de ser en base a sus resultados, no en base a las horas que esté en la oficina.
Jamás le he dicho a nadie que «no era la hora» si empezaba a recoger un rato antes, si el trabajo estaba bien hecho. Al contrario, cuando alguien sistemáticamente se queda más de «su hora», pongo sobre el mantel, que o a esa persona le faltan recursos y necesita ayuda, o bien no es suficientemente capaz para hacer su trabajo.
No es que sea de meterme donde no me llaman, es que, desde RR.HH., y más si quiero predicar con el ejemplo, es mi responsabilidad y mi obligación llamar a las cosas por su nombre, aunque no guste a todos.
Ahora bien, llegado a este momento, en que nada es como era hace dos años, y así va a seguir la cosa, ¿cómo puedes orientar a resultados el trabajo de tu equipo?.
Porque si no hay «silloning», o si sólo lo hay unos días a la semana, ¿qué haces?.
Realmente, si hasta ahora lo estás haciendo bien, bien va a seguir y no has de tener problemas. Y tu me preguntas, ¿qué es hacerlo bien?.
Para tender a resultados y alcanzar los deseados objetivos, una buena gestión de tus RR.HH. te va a ser de gran ayuda. Mejor dicho, es imprescindible.
Hasta que las máquinas nos sustituyan a todos al cien por cien (que espero nunca llegue), el elemento clave que más te facilita o entorpece el camino son las personas.
Cosas que te conviene hacer:
– Contar con el talento que necesita tu negocio.
No hablo de más formado o menos, ni del más caro o el más barato, hablo del «adecuado». Tener el equipo que no necesitas, o no contar el que te hace falta, es matarte a trabajar para nada.
– Tener actualizadas las DPT, que son las descripciones de los puestos de trabajo.
No tenerlas conlleva gente que no sabe qué ha de hacer, funciones que se duplican y mal ambiente.
– Disponer de un sistema de evaluación del desempeño basado en objetivos.
Al no tenerlo te pierdes que todos remen en la misma dirección, y sepan que no basta con hacer horas, sino en obtener resultados.
– Una buena distribución del tiempo, lo que supone una buena organización de los recursos.
No tenerlo, equivale a reuniones interminables, a ser incapaz de llegar a todo, a estrés, y una vez más, a insuficientes resultados.
Esta es la realidad, si no lo haces, te pasará factura.
No es cualquier cosa, ¿verdad?. Pero no te agobies si no te encuentras preparada para esta gesta. Tu haces bien tu trabajo, permíteme que yo te ayude en esto que es lo mío desde hace más de 25 años.
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