Contratar personal para tu empresa, para crecer sí, para sobrevivir no.
Así tal cual me salió ayer esta frase lapidaria, cuando una clienta me contaba que está hasta los topes de trabajo, y la gente le dice que por qué no amplía el equipo.
¿No me digas que nunca te lo has planteado?. Porque cuando el sol no sale ni por Antequera, y el trabajo se acumula, es normal pensar en contratar nuevo personal.
Pero claro, no es una decisión tan sencilla, y no debería adoptarse «por impulso». Y mira que por mi genial, porque me dedico a la selección de personal, pero no estaría bien.
Crecer en plantilla, erróneamente, se asocia a crecer en negocio, a escalar, a obtener mayores ingresos y más beneficios.
He visto empresas que en 2 años han pasado de 2 a 20 empleados y han cerrado a los 25 meses. Por lo tanto, la cosa no va de cantidad.
Antes de plantearte realizar una nueva contratación laboral reflexiona sobre lo siguiente:
La carga de trabajo, ¿es temporal o va a ser permanente?
La nueva contratación de personal, ¿me va a permitir escalar el negocio o sólo sobrevivir a «la crisis»?
¿Qué valor añadido le proporciona al negocio?, un idioma con el que trabajar con nuevos mercados, conocimientos digitales, una especialización para hacer crecer un área, ¿por ejemplo?.
Porque ante una situación estacional, existen alternativas temporales también. Aún queda algún contrato temporal al que acudir para determinados supuestos, puedes subcontratar el trabajo a un freelance o buscar colaboradores, puedes acudir a una empresa de trabajo temporal, por citar algunos ejemplos.
Ampliar la plantilla es una decisión estratégica, o al menos debería serlo. Y ya sabes que para mi, la estrategia y procurar que todas las áreas del negocio y las acciones y decisiones que les acompañan sean coherentes entre sí, es irrenunciable.
Porque los parches son como las tiritas, en cuanto se mojan un poco se desprenden.
Se por experiencia que decidir contratar a alguien es lo primero que les suele venir a la cabeza de mis clientes cuando se ven con agua al cuello.
Pero para eso existe una herramienta que utilizamos todos los días a todas horas, y que a veces se nos olvida que en el trabajo también funciona. Planificar.
Prever y planificar, dos palabras mágicas.
Si prevés que vas a tener una época de trabajo extra, y que con el equipo de que dispones no vas a poder atenderla en condiciones, si lo planificas con tiempo puedes plantearte, por ejemplo:
Formarles en las nuevas herramientas o conocimientos que vais a necesitar. El perfil estático que se limita a hacer sólo una cosa, va a pasar a la historia, porque las empresas necesitamos un equipo capaz de responder con inmediatez a los enormes cambios y retos con los que nos estamos encontrando.
Diseñar un plan de carrera. Que además es una gran fuente de motivación interna.
Revisar las descripciones de los puestos de trabajo y reorganizar funciones y tareas si es necesario.
Te invito a escribirme si te encuentras en la disyuntiva de si necesitas contratar personal, o en alguna de estas situaciones, llevo más de 25 años en la dirección de personas gestionando todos estos procesos y participando en la toma de decisiones. ¿Ves?, no hace falta que me incluyas en la plantilla, las subcontrataciones y delegar en estos casos funciona muy bien.
…
Si estos temas te interesan, te invito a que ahora te des alta en mi newsletter para recibir mis consejos y noticias sobre emprendimiento cómodamente en tu correo.