Un negocio se puede mentorizar desde su inicio, cuando la emprendedora cuenta con una idea pero aún no la ha puesto en marcha. Y también se puede mentorizar cuando su empresa lleva años en marcha.
Cada caso es diferente y único, al menos esa es mi forma de entenderlo y de trabajar. Y por ello cada mentoría la diseño a medida de las necesidades de la empresaria o emprendedora.
Pasos de una mentoría de negocio, desde la idea a su puesta en marcha
Pero hoy te voy a contar cómo llevo a cabo, paso a paso, la memorización de una empresa, es decir, una mentoría de negocio, desde su inicio.
He escogido un caso de éxito de una de mis clientas del que ya te hablé, para contarte como la ayudé a hacer realidad su idea de negocio, y de qué manera la mentoría sigue ayudándole 3 años después (a ella y a su marido, ahora te cuento).
Todo comienza con un té.
Sí, un té. ¿Sabes por qué?
Porque es mi forma de entender la relación con mis clientas y de llevar a cabo una mentoría.
Si sientes curiosidad, ve a la página de inicio de mi web y lo entenderás.
Agendamos un té virtual donde dedico media hora a escucharte, a entender lo que necesitas. Y donde tu puedes conocerme personalmente, ver si hay “feeling” (¡tan importante en la relación mentora-mentee!) y preguntarme lo que quieras.
Y con la información que me has facilitado preparo una propuesta de contenidos y de duración a tu medida.
Con María, esa reunión inicial se produjo en pleno confinamiento, ella en Holanda, donde vivía y trabajaba por cuenta ajena por entonces, y yo en Valencia.
¿Emprendimiento social en la España vaciada?
María partía de sólo una idea, ¡y mucha pasión! Sin ser conscientes todavía, estábamos empezando a esbozar un emprendimiento social en la (prometo que no entiendo la denominación) llamada España vaciada.
Comenzamos nuestra primera sesión a finales de mayo y en septiembre ya estaba asentada en España, ¡y empezando a facturar!
No te vayas a creer que todo el mérito es mío, su tesón y su compromiso con el programa fue determinante. Y lo sigue siendo 3 años después.
Análisis de la idea en la mentoría de negocio
Una idea de negocio, antes de pasar a la acción, que es lo que todo el mundo desea, necesita de un buen análisis. ¿Por qué sabes una cosa? La idea no es lo más importante. Toda idea, y más si es buena, antes o después te la van a copiar (si no es que ya existe).
La estrategia es la que convierte una idea en un proyecto viable. Y no hay estrategia sin análisis.
De otro modo, la idea puede quedarse en quimera.
Y algo que muchas veces se pasa por alto en una mentoría, yo empiezo siempre por reflexionar con mi clienta. En este caso fue con María, sus expectativas personales y profesionales, su propósito personal, sus prioridades.
Porque propósito personal y emprendimiento deben ir de la mano. Si no van en sintonía, la balanza se desequilibra y viene la ansiedad y la insatisfacción personal.
En su caso lo bordamos. María, tras muchos años viviendo por todo el mundo, quería regresar a su tierra para ayudar a los negocios y a los profesionales del entorno rural a hacerse visibles en internet y en redes sociales.
Lo tenía clarísimo. Ayudar y ayudar, ese era el centro de la ecuación. La preparación profesional la tenía, lo que le faltaba era la parte empresarial. Algo muy habitual, por cierto.
Análisis DAFO de la idea de negocio
Empezamos por realizar un análisis DAFO de las fortalezas, debilidades, amenazas y oportunidades de su idea.
Esbozamos su modelo de negocio. Qué servicios ofrecer, cuál sería su propuesta de valor, y algo que trabajamos muy a fondo, el nicho de mercado al que dirigirse.
Fue estupendo cuando este año, al revisar su target, verificamos que es el que a día de hoy es su cliente real.
Y, como no, estudiamos el mercado competitivo de María, lo cual, como ocurre siempre, os abre mucho los ojos y la mente.
Así llegamos al peldaño que menos os suele apetecer, y que cuando nos ponemos a ello, más agradecéis. ¡Los números!
Costes, precios … son imprescindibles.
A María tampoco le apetecía mucho el tema, pero a día de hoy, ¡hasta lo disfrutan!. Les abre tanto los ojos y les proporciona tanta orientación y confianza, que ya no falta hace que se lo recuerde.
Y, ahora, comunicación y marketing del negocio
Y fue hacia la quinta sesión, en el su caso fueron 6 en total, cuando empezamos a diseñar la estrategia de comunicación y marketing.
¿Por qué no antes?, ¡porque la comunicación ha de ser coherente con todo lo anterior! Y la estrategia de marketing también.
El nombre de la empresa, eso fue divertido. ¿No te he dicho que su marido se llama Jasper? Un holandés que se unió al proyecto con María, dejando atrás trabajo, país, familia y amigos.
Así, que merecido tiene que María no dudara al conectar sus nombres. Masper Comunicación Digital, ¡voilá!.
Lo del logo fue otra aventura, pero reconozco que el moadboard que preparó María lo bordó. Y es que, si has hecho los deberes como ellos, las decisiones sobre la identidad corporativa de la empresa caen por su propio peso.
Los objetivos de desarrollo sostenible del negocio
Y los ODS, no nos olvidemos de ellos.
Y de ahí si que ya nos pusimos con la forma de trasladar el mensaje al cliente potencial, cómo conectar con él, con qué mensajes y mediante qué canales (no te creas que en el mundo rural basta con las redes sociales y tener una web).
En fin, y resumiendo, que María, en tan solo 3 meses logró materializar su idea de negocio, dejar un empleo por cuenta ajena, regresar e instalarse en su pueblo de Castilla-La Mancha, empezar a facturar a sus primeros clientes, ¡y hasta casarse con su holandés!
Pero … ¿y qué sucede cuando concluye la mentoría y te quedas tú sola ante el peligro?.
Nada, nada de nada.
No te quedes sola en tu negocio
Porque no tienes porqué quedarte sola con tu emprendimiento. Sería de locos, la verdad.
Desde que terminamos la mentorización, hace 3 años, todos los meses nos reunimos una hora para comentar lo que ha pasado ese mes, analizar acciones y resultados, planificar, fijar los objetivos del año siguiente, y en general, seguir avanzando en su negocio.
Sin lugar a dudas, me siento parte de su equipo, y es una satisfacción que ellos sientan lo mismo.
Y hasta aquí por hoy, hablando de estas mentoría de negocio reales, espero haberos trasladado los pasos de una mentoría de negocio cuando partimos sólo de una idea.